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La alcachofera es una planta de hoja perenne que puede llegar a medir hasta 2 metros de altura. Su fruto son las alcachofas, comestibles en su base que es tierna y ricas en vitamina B, hierro, magnesio, fósforo y potasio.
Las variedades más típicas en España son la variedad blanca de Tudela y la variedad monquelina. A...
La alcachofera es una planta de hoja perenne que puede llegar a medir hasta 2 metros de altura. Su fruto son las alcachofas, comestibles en su base que es tierna y ricas en vitamina B, hierro, magnesio, fósforo y potasio.
Las variedades más típicas en España son la variedad blanca de Tudela y la variedad monquelina. A continuación puede ver el entorno en el clima que se desarrolla el cultivo, cómo cultivar alcachofas y las plagas y enfermedades típicas de esta especie.
Clima adecuado para la alcachofa:
El periodo que transcurre desde la siembra de las semillas hasta la recogida del fruto está entre 8 meses y 10 meses. La siembra se realiza en el periodo comprendido entre marzo y junio.
De otro modo podemos acelerar este periodo trasplantando las estacas en vez de sembrar las semillas, este periodo comprende unos 5 meses aproximadamente. El trasplante se realiza en el periodo comprendido entre julio y septiembre.
Antes de su trasplante se debe preparar bien el terreno, para que las raíces tengan una aireación apropiada y para que mejoren las condiciones de drenaje del suelo. Además una buena preparación del terreno nos asegurará una mayor penetración de las raíces y una mejor nutrición del cultivo.
Para que el suelo quede bien preparado deberemos arar el terreno para evitar una base impermeable causante de humedad excesiva y a su vez enfermedades.
Se recomienda cultivar las alcachofas en caballones anchos y con unos 70 centímetros de separación entre planta y planta.
Requiere un abonado de fondo, y un aporte de fertilizante regular para conseguir un buen fruto.
El primer riego de la alcachofa es tras la plantación y se deberá regar habitualmente para evitar la desecación de la tierra. Después se recomienda hacer riegos profundos para que las raíces crezcan bien, y en la época de recolección deberá de tener una buena humedad para que las flores crezcan con un buen calibre.
Una de las plagas más presente en este tipo de cultivos es el pulgón ya que aguanta muy bien las bajas temperaturas. Se alimenta de la savia de la planta, reduciendo así su capacidad fotosintética y provocando una falta de oxigenación y nutrientes apreciable en el cultivo.
Además del pulgón también son muy comunes en las alcachofas las plagas de gusano barredor, minador de la alcachofa además de babosas y caracoles. También suelen afectar a la alcachofa ácaros como la araña roja e insectos como el trip.
Las enfermedades más frecuentes en el cultivo de la alcachofa son la oidiopsis conocida popularmente como blanqueta, que produce sobre las hojas de la planta una capa de color blanca aparentando vejez en éstas. Esta enfermedad es más fuerte en cultivos que se encuentran en entornos de altas temperaturas.
La rhizoctonia es una enfermedad de origen radicular. Se suele detectar en los primeros días después de su trasplante y va desapareciendo al crecer la planta.
También comúnmente se conoce el hongo verticillium que se desarrolla en el interior de la alcachofa se nota una detención en el crecimiento y desarrollo de la planta.