54,12 € en total
27,39 € en total
¿Qué es el Repilo?
El Repilo es una enfermedad que causa la presencia de un hongo que sólo resulta patógeno en el olivo. Se trata del hongo “Fusicladium oleagineum”, anteriormente conocido como Spilocea oleagina.
¿Cómo saber si nuestro olivar está afectado por esta enfermedad?
En el haz de las hojas se manifiesta en forma...
¿Qué es el Repilo?
El Repilo es una enfermedad que causa la presencia de un hongo que sólo resulta patógeno en el olivo. Se trata del hongo “Fusicladium oleagineum”, anteriormente conocido como Spilocea oleagina.
¿Cómo saber si nuestro olivar está afectado por esta enfermedad?
En el haz de las hojas se manifiesta en forma de manchas circulares de color oscuro que, en ocasiones, están rodeadas por un cerco amarillento. También, aunque menos común, podemos ver estas manchas, de una forma más difusa, a lo largo del nervio central por el envés.
Aunque de forma menos frecuente, las podemos llegar a observar en el pedúnculo de la aceituna.
Esta enfermedad se da predominantemente durante los periodos húmedos del año (otoños-inviernos y primaveras frescas y lluviosas), ya que el hongo se desarrolla en un rango de temperaturas de entre 15 y 20 grados y con lluvia o una humedad por encima del 98%.
Un dato importante a tener en cuenta es que en un periodo de uno o dos días el hongo es capaz de dispersarse, infectando otras hojas (o frutos) y extendiéndose por los olivos cercanos.
¿Qué problemas en la producción causa esta enfermedad?
Al generar la defoliación del árbol, claramente afectará a nuestra productividad.
Si llegara a afectar al fruto, además repercutirá seriamente en la calidad de nuestro aceite o en la no posible comercialización como aceituna de mesa.
¿Cómo detectarlo, prevenirlo y combatirlo?
Además de la lógica observación de los síntomas visibles, se pueden ir midiendo en muestras, sumergiendo hojas en sosa caustica al 5% durante un periodo de 20 minutos. Si la enfermedad está en estado latente aparecerán unos puntos negros en el haz de la hoja, como hechos con rotulador. Este proceso se puede realizar antes de que se den las condiciones climáticas, antes comentadas, en las que la enfermedad va a hacerse visible.
Para prevenirlo, en la medida de lo posible:
- Podas que favorezcan que el olivo esté aireado (se seca antes, después de humedecerse),
- No excederse con los abonos nitrogenados
- y, en nuevas plantaciones, disponer las plantas de forma que tengan el menor número horas de sombra (disposición de las hileras).
Para nuevas plantaciones, saber que hay variedades resistentes al repilo, como son Lechín de Sevilla, Manzanilla de Hellín o Picudo de Montoro.
Lo combatimos principalmente con Cobres, tanto de forma preventiva (interesante cuando lo tuvimos en la anterior estación de riesgo (6 meses) como de forma activa cuando se dan circunstancias óptimas para el desarrollo del hongo (con un repilo visible de más de 1%).
Un consejo … Evitemos la carencia de potasio, el cual fortalece el olivo frente a esta enfermedad.
A continuación te mostramos una serie de productos interesantes a tener en cuenta a la hora de prevenir y/o combatir esta enfermedad.